Para recibir financiación del gobierno los proveedores de atención médica deben presentar reclamos que cataloguen los informes de pago, así como presentar registros específicos que respalden sus peticiones. Si los proveedores de atención médica muestran solicitudes, registros falsificados o intencionalmente engañosos en un esfuerzo por obtener fondos federales injustificados, pueden estar violando la Ley de Reclamos Falsos.

La estafa en la atención médica es la forma más perjudicial de fraude gubernamental, ya que representa más de $60 mil millones de dólares perdidos por los contribuyentes de impuestos cada año. A pesar de esta representativa cifra, el gobierno no tiene un grupo de vigilancia para contener el fraude en la atención médica y, por lo tanto, depende casi totalmente de los denunciantes que acuden a la Ley de Reclamos Falsos para recuperar los fondos robados.

Si tiene conocimiento de algún fraude en el sector de la salud, contacte con nuestros abogados de confianza especializados en la Ley de Reclamos Falsos para saber qué puede hacer hoy mismo para detener el fraude en el sector de atención médica. Simplemente complete nuestro formulario de revisión gratuita de casos hoy.

Formas comunes de fraude en la atención médica

A continuación enumeramos las formas más comunes en las que las empresas y los individuos defraudan anualmente a Medicare y Medicaid:

  • Facturar por servicios o suministros nunca proporcionados.
  • Presentar informes engañosos de costos.
  • Presentación de registros falsificados.
  • Ofrecer sobornos u otros pagos ilegales.
  •  Comercialización de drogas o dispositivos médicos para fines no aprobados.

¿Por qué se produce el fraude en la atención médica? 

Una de las razones por las que el gobierno federal no puede reconocer adecuadamente el fraude en la atención médica es porque la información de pago falsificada se oculta bajo la terminología médica. A menudo las empresas de atención médica hacen parecer que ciertos servicios se han prestado o son necesarios (cuando, en realidad, ni lo uno ni lo otro es cierto), utilizando términos clínicos que, para cualquier persona sin título médico, parecerían legítimos. Por esta razón, los denunciantes en los casos de estafa en la atención médica suelen ser empleados de la empresa fraudulenta que están familiarizados con los procedimientos médicos y las prácticas de la compañía.

En estos casos no es inusual que el denunciante se preocupe por la seguridad del empleo y el acoso en el lugar de trabajo por presentar una demanda basada en la Ley de Reclamos Falsos. Afortunadamente, la ley protege a los denunciantes de las represalias de los empleadores y de la discriminación de cualquier tipo, e incluso ofrece una compensación en caso de que se produzca un acoso.

En Morgan & Morgan no sólo podemos ayudarle a presentar una demanda de forma segura, nos asegurarnos de que, como denunciante, esté protegido con todo el rigor de la ley. Para obtener más información sobre la Ley de Reclamos Falsos y la protección de los denunciantes, simplemente llene nuestra evaluación gratuita de casos para que un abogado revise su reclamo sin costo alguno para usted.